SARA BÀRCENA (profesora de Literatura)

La palabra, el principal ingrediente

Una profesora de los Dominicos lleva 16 años impulsando talleres de arte dramático y una revista literaria para sus alumnos

05.08.2013 | 00:00

Sara Bárcena de Cuendias, con su grupo de alumnos de diversificación.

Lucía FERNÁNDEZ

Compatibilizar la pasión por la educación con el amor por la palabra es posible. Este es el caso de la profesora de Lengua y Literatura del colegio Santo Domingo de Oviedo, Sara Bárcena de Cuendias. Su trabajo no termina en las cuatro horas lectivas a la semana ni tampoco en el taller literario que prepara también semanalmente, sino que se lo lleva a casa. «Mi trabajo, además del académico es cuando llego a casa y los alumnos me mandan, de manera voluntaria, sus textos hasta el punto de que lo han incorporado como un anexo más de la asignatura», asegura. Y así es como surgió en 1997 la revista de literatura, artes y música «La Caja de Pandora», que se gestó en una clase, por la inquietud personal de hacer algo más por sus alumnos porque «la literatura nos ayuda a acercarnos a nosotros mismos», dice. Trece años después y con el avance de las nuevas tecnologías surgió la oportunidad de introducirla en la red cediendo la palabra a todos los alumnos y ayudando a una mayor difusión. Muchos estudiantes, ahora forjados en el panorama cultural asturiano, compartieron páginas y palabra con célebres intelectuales de la talla de Ángel González, Antonio Gamoneda, Aurelio García Ovies, Rosario Neira, Luis García Montero, Almudena Grandes, Fernando Delgado o Víctor García de la Concha. La revista, además, da la oportunidad de darse a conocer como verdaderos autores «que se adentran en sus experiencias personales con el mundo y sus complejidades interiores».

«Este taller les permite encontrar su lugar en la palabra. Muchos de ellos tienen una poética increíble y también les ayuda a perder el miedo. Es raro el alumno que no se haya subido ya a un escenario», apunta de Cuendias, ya que también está vinculado al arte en general. «Es una satisfacción enorme cuando no me conocen de nada y me preguntan si va a haber talleres» añade.

Paralelo a éste, surgió hace unos años un proyecto educativo que tiene como objetivo educar en la diversidad y en la sensibilidad a los alumnos de diversificación. La profesora ayuda a los alumnos del ámbito sociolingüístico a trabajar para sacar lo mejor de ellos: la palabra.

Además de los talleres semanales, también prepara otros de música o danza. Ahora la inquietud de la profesora es organizar para el curso que viene un taller literario y musical.