Caunedo exige un «calendario claro, fijo y definitivo» de las obras del Bellas Artes
Marcos Vallaure dice al Alcalde que su interés «viene con 10 años de retraso»
M. S. MARQUÉS
La inauguración de una exposición de homenaje al fallecido fotógrafo Alonso en el Museo de Bellas Artes de Asturias se convirtió ayer en un acto reivindicativo en favor de la finalización de las obras de ampliación y de la dotación de personal cualificado para el centro.
El alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, que visitó la muestra y las obras de ampliación del museo acompañado del consejero de Cultura en funciones, Emilio Marcos Vallaure, fue tajante a la hora de manifestar su decisión de no aceptar más retrasos en un proyecto de ampliación que lleva trece años de recorrido.
«Exijo como alcalde un calendario claro, fijo y definitivo de las obras y de la apertura completa de este museo, y un proyecto de dotación de personal». Iglesias Caunedo describió el museo como uno de los activos culturales de Oviedo, un activo que, a su juicio, «la desidia y la falta de seriedad» ha convertido «en un gran museo ahogado, con la ampliación sin acabar y graves problemas de espacio y de personal».
Para el Alcalde, que considera una «cuestión de dignidad» sacar adelante el proyecto, la jubilación de Marcos Vallaure, a quien calificó de «alma y motor de cuanto bueno tiene hoy el centro», deja la entidad «sin nadie cerca que mire con auténtico interés por su futuro».
Si para Caunedo es prioritario contar con un museo como atractivo cultural para la ciudad, no lo son los centros museísticos surgidos en los últimos años por todo el territorio, que calificó de «proyectos absurdos y moderneces varias». Por todo ello, no está dispuesto a aceptar que se diga que no hay dinero porque más bien «lo que no hay es ganas», dijo, y amenazó con no consentir ni un plazo incumplido más y con acudir después del verano para celebrar el fin de los trabajos de la primera fase o censurar públicamente su incumplimiento.
Alonso en su estudio
Retrato de Carlos Sierra
Retrato de Alonso 2002 de Pedro Pablo
Retrato de Manolo Calvo
La inauguración de una exposición de homenaje al fallecido fotógrafo Alonso en el Museo de Bellas Artes de Asturias se convirtió ayer en un acto reivindicativo en favor de la finalización de las obras de ampliación y de la dotación de personal cualificado para el centro.
El alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, que visitó la muestra y las obras de ampliación del museo acompañado del consejero de Cultura en funciones, Emilio Marcos Vallaure, fue tajante a la hora de manifestar su decisión de no aceptar más retrasos en un proyecto de ampliación que lleva trece años de recorrido.
«Exijo como alcalde un calendario claro, fijo y definitivo de las obras y de la apertura completa de este museo, y un proyecto de dotación de personal». Iglesias Caunedo describió el museo como uno de los activos culturales de Oviedo, un activo que, a su juicio, «la desidia y la falta de seriedad» ha convertido «en un gran museo ahogado, con la ampliación sin acabar y graves problemas de espacio y de personal».
Para el Alcalde, que considera una «cuestión de dignidad» sacar adelante el proyecto, la jubilación de Marcos Vallaure, a quien calificó de «alma y motor de cuanto bueno tiene hoy el centro», deja la entidad «sin nadie cerca que mire con auténtico interés por su futuro».
Si para Caunedo es prioritario contar con un museo como atractivo cultural para la ciudad, no lo son los centros museísticos surgidos en los últimos años por todo el territorio, que calificó de «proyectos absurdos y moderneces varias». Por todo ello, no está dispuesto a aceptar que se diga que no hay dinero porque más bien «lo que no hay es ganas», dijo, y amenazó con no consentir ni un plazo incumplido más y con acudir después del verano para celebrar el fin de los trabajos de la primera fase o censurar públicamente su incumplimiento.
Màquina de Alonso
Retrato de Aleandro Mieres
Màquina de Alonso
Las palabras del Alcalde fueron bien acogidas por Marcos Vallaure, que lamentó que no se hubieran producido antes. «Vienen con diez años de retraso», dijo, para añadir que lo sucedido no es responsabilidad suya ni del Alcalde. Reconoció la existencia de grandes problemas y la necesidad de tener una entidad a la altura de la colección que conserva «porque no puede ser un museo de primera con una organización de tercera». También alertó del peligro de quedar sin la segunda fase de las obras si no se alcanza un pacto político en su defensa. Emilio Marcos Vallaure no aclaró si le gustaría seguir al frente del centro en el que estuvo 32 años, pero dijo estar «a disposición del museo». 
No hay comentarios:
Publicar un comentario